Proveemos evidencia para la reflexión y la acción.
Policy Brief # 2
¿Quién vigila a los vigilantes? La política económica de la violencia en Ecuador
Resumen: El gobierno de Guillermo Lasso ha fracasado en su intento por contrarrestar la violencia criminal en las cárceles y en las calles. En vez de revisar su estrategia de seguridad y mejorar la coordinación intraestatal, persiste en incrementar el poder coercitivo del Estado, sin considerar su efectividad ni explorar otras opciones. Así se está formando un círculo vicioso. A medida que crece la violencia criminal también aumenta la influencia política y el poder económico de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas. Están creándose incentivos perversos para que la espiral de violencia no termine, o culmine con una paz mafiosa.
Aquí argumentamos que esta política económica de la violencia corroe las reglas democráticas y acrecienta la influencia del crimen organizado. ¿Qué hacer? Es urgente crear mecanismos independientes de supervisión para transparentar el desempeño de la fuerza pública y evaluar su efectividad.
Policy Brief # 1
¿Qué hacer –y no hacer– para contrarrestar la violencia criminal?
Resumen: Ecuador vive una creciente ola de violencia criminal, pero carece de una explicación sobre sus causas, lo que impide diseñar políticas efectivas para contrarrestarla. Este documento cuestiona la versión oficial y esboza una hipótesis alternativa, justificando un cambio urgente en la política de seguridad pública.
Argumentamos que para explicar la violencia criminal el factor crucial es el Estado. No porque esté ausente, sino porque está involucrado en la reproducción social, económica y política del crimen organizado. Sostenemos que para contrarrestar la violencia criminal el gobierno debe promover una depuración de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas, en el marco de una reforma del sector de la seguridad a gran escala. Caso contrario, los agentes estatales que coluden con el crimen organizado desde hace años continuarán operando y el gobierno seguirá mordiéndose la cola.
Proponemos algunas recomendaciones para implementar la política sugerida y explicamos lo que NO debe hacerse para enfrentar este problema.